sábado, 9 de marzo de 2013

Vacío

Hay días como hoy. Días en los que el Sol en mi piel no calienta este corazón helado. Días en los que nada parece llenar este agujero que has dejado en mí. Días en los que sé que nunca recuperaré lo que te llevaste. Me falta esa tristeza tan mía, tan nosotros. Esa tristeza que me recuerda a ti, que me recuerda que te amo, y que tú, allá dónde estés, también lo haces. Dos amantes condenados a vivir separados, aunque juntos en la distancia. Esa tristeza recíproca, por amarnos y no tenernos. Esa alegría triste por saber que nos podemos consolar el uno al otro. Sin besos, sin caricias, sin abrazos... solo con palabras. Esa tristeza alegre ha sido reemplazada por una tristeza triste, que está pasivando mis sentimientos. Y es que el Sol ya no me calienta, ni el viento me acaricia la piel. Mis oídos no escuchan el cantar de los pájaros, mi piel no recuerda tu tacto. Solo hay vacío. Vacío lleno de tu recuerdo. Del recuerdo de tu esencia. Y de tu ausencia.

sábado, 29 de diciembre de 2012

WINE IS FINE, BUT WHISKEY IS QUICKER

Take a bottle, drown your sorrows

Cuando las palabras no fluyen, cuando decenas de hojas intentan mantener el equilibrio en el Everest en que se ha convertido la papelera.... Ese es el momento de ponerte un whisky doble y dejar que sea la música la que hable. Recorrer la casa descalza, con una camisa tuya a medio cerrar. Dejar que mis dedos se deslicen por el brillante negro del piano de cola. Dejar el vaso sobre el piano, sentarme, liberar mi mente y dejar que la música fluya hasta mis dedos,  acariciando las teclas, arrancando tristes suspiros al piano que no son más que un eco de los míos.

Y perderse en la música.

martes, 4 de septiembre de 2012

De profesión, albañil...

La vida es como una casa de muchos pisos. Cada persona, cada cosa a la que damos importancia es una piedra en esa casa, y tiene un tamaño proporcional a esa importancia. Si una piedra pequeña se pierde, la casa sigue siendo sólida. Si una piedra grande se pierde, todo lo que hemos construido sobre ella se destruye.
Hay que asegurarse de que las piedras angulares que elijamos sean sólidas, pues ellas sustentarán nuestra vida entera. La pérdida de una de estas piedras conlleva la reconstrucción total de la casa, de la vida. Y sabemos bien, amigos, que antes de construir la nueva casa hay que limpiar los escombros. Aunque siempre queda algún resto que acabará saliendo en el futuro, resquebrajando los muros que pacientemente reconstruimos.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Hear me out before you walk up out that fucking door


I love you like no other
I treat you like no other
I need you in my motherfucking life
I promise, I swear I'd die without you

jueves, 24 de mayo de 2012

En algún momento de este último año decidí derrumbar ese muro sólido que a lo largo de cuatro duros años había levantado alrededor de mis sentimientos. Finalmente ha llegado ese momento que tanto temía. El día en el que esos sentimientos que ahora están tan expuestos (y con ellos yo misma), se vuelven en mi contra y me hacen derrumbarme.
Toca hacer balance de estos meses. Ver si ha merecido la pena lo que he ganado a cambio de lo que me va a tocar sufrir a partir de ahora. Las clases de estadística y economía no me sirven para esto. Toca adentrarse en la parte más oscura de mí. Buscar en los rincones de mi mente y sobrevivir a esta búsqueda interna sin enloquecer. Aunque quizás lo más fácil sea enloquecer. Distorsionar la realidad, vivir en un mundo paralelo en el que olvidarse de este.
Pero un mundo sin ti no merece la pena. Ni en este mundo ni en ningún otro.

viernes, 11 de mayo de 2012

Llega el día en el que no te quedan más lágrimas. Llega un día en el que sabes que te toca seguir adelante. Es muy cómodo perderse en la autocompasión, pero tarde o temprano la realidad vuelve a sacudirnos la cara. No se puede parar el tiempo. La vida sigue su curso, y te arrastra con ella. Así que llega el día en el que te armas de valor y te enfrentas a lo que queda de tu vida. Unas tristes ruinas que te representan. Empieza la etapa de reconstrucción interna; lenta, dura y difícil. Sería muy fácil abandonar. Puedes parar el tren cuando quieras, Pero una vez abajo no podrás volver a subirte. Algún día, con suerte, puede que todo vuelva a estar en su sitio. Quizás algún día el hueco que dejaste se llene. No pretendo que deje de doler, sé que es imposible. Pero necesito aprender a convivir con este dolor que me consume y me hará enloquecer.






Cinco años después, a punto de ser consumida por el dolor y la oscuridad, aparece un faro que le da rumbo a mi vida. Alguien que disipa todos mis miedos, que me va devolviendo la esperanza perdida. Un guía para este navío sin rumbo. Él.
Psicópata.
Me lo habrán dicho mil veces, incluso estuve a punto de creérmelo. Quería aferrarme a la esperanza de encontrar algo que me hiciese sentir otra vez algo más allá de esta fría indiferencia que me produce todo. Y quien busca, encuentra. Giro la cabeza y te veo dormir. Vulnerable. Expuesto a mí. Sería muy fácil matarte, tu cuello queda totalmente expuesto a mí. Tu corazón también. Y tu cara... esa expresión. Afable y tranquila. Gotas de sudor perlan tu frente, fruto de la fiebre.
Confías en mí. No sé cómo me pude ganar a alguien como tú. No sé cómo sigues a mi lado a pesar de todo lo que sabes de mí. Y sin embargo aquí estás. Tu brazo alrededor de mi cintura. Agarrándome como si tuvieses miedo de perderme. De vez en cuando despiertas sobresaltado. Me miras. Sonríes. Te incorporas y me besas. Vuelves a cerrar los ojos y a los pocos minutos vuelve a oírse tu respiración acompasada. Quizás lo que te despierta no es el miedo a perderme, quizás intuyes lo que pasa por mi mente. Sabes que el día en que me dejes tendré que matarte. Sin embargo, será por supervivencia. No soy una psicópata. Tu muerte me dolerá eternamente. Cada fibra de mi ser me reprochará cada segundo de esta vida el haber acabado contigo.
Hasta entonces, no podré evitar susurrarte que te quiero.